El consumo de papel en España cae un 5% hasta junio del 2008.
El consumo de papel en España cae un 5% hasta junio del 2008.
Pese a lo que se pueda pensar, la era digital no está matando al papel. Es más, la masiva recepción de todo tipo de información ha elevado su uso, omnipresente en todos los campos de la vida, convirtiéndonos en pequeños impresores. Esta situación convierte al sector papelero no sólo en un índice del desarrollo de un país, sino también es un termómetro de la marcha de la economía. Y en el primer semestre, el consumo de papel ha caído en España el 4,8% hasta los 8,7 millones de toneladas. Como explica el director general de ASPAPEL, Carlos Reinoso, la caída sin ser dramática, ha sido generalizada en los tres grandes grupos de papel: la impresión, higiénico y sanitario, y embalajes. Porque por lógica, si se cena menos en restaurantes, se compra menos ropa o menos productos de consumo, se resienten las facturas, la publicidad, la tirada de la prensa, los albaranes, y sobre todo, los embalajes, etc. España es el sexto productor de papel de la UE, por detrás de Alemania, Finlandia, Suecia, Italia y Francia, con 113 plantas industriales (14 fábricas de celulosa y 99 fábricas de papel), 18.100 empleos directos y más de 90.000 empleos indirectos. En 2007, el sector papelero español facturó 5.000 millones de euros. Pero como indica Reinoso, la industria ha sido capaz de compensar la pérdida de cuota en el mercado interno con las exportaciones (+9,7%). En concreto, se ha exportado la mitad de la producción y el 80% de esa exportación ha ido a parar a países de la UE. El problema es que esos mercados europeos también están registrando descensos, aunque menos acusados que los del caso español.
Fuente: IPE
ES-0931
