Embalajes anticorrosivos
Embalajes anticorrosivos
Embalar y proteger contra el óxido
Para embalar metales y protegerlos contra el óxido el mejor sistema es ponerlos en bolsas con el aditivo anticorrosión VCI.
En caso de tener que enviar materiales susceptibles de corrosión por mar es prácticamente imprescindible, pero también lo es para estocar piezas antes de pintar en la misma empresa. O para entregar recambios en bolsa individual para evitar que se oxiden durante el transporte o en el almacén del distribuidor.
Almacenaje de piezas en proceso de fabricación:
Para este proceso lo mejor es usar algún tipo de jaula o caja reutilizable de las que van sobre un palet. Después se pone la bolsa, de la medida de la caja, dentro de la misma. Después se van colocando las piezas y al final se cierra solapando una sobre la otra o precintando un poco, no hace falta soldar bien. En caso que la caja sea muy grande se pueden colocar dos o tres láminas de este mismo material entre las capas de piezas interiores.
Envasado individual de piezas:
Para el envasado individual de piezas se pueden usar varios sistemas según la pieza de la que se trata y de las necesidades de embalaje de la misma:
Por una parte podemos usar la bolsa de cierre rápido que es muy aconsejable para recambios ya que permite ver la pieza, volver a cerrar y mantener el proceso anti corrosión.
Por otra parte, si el material es delicado, se puede envasar en bolsas de burbuja con este aditivo o también, si no es muy delicado, se puede poner con tubo soldado. En este caso es más difícil abrir y volverlo a cerrar.
Se puede aplicar también automáticamente en máquinas tipo Flow Pack o tipo retractiladoras en L. En estos casos acepta también el proceso de retractilado sin problemas.
Para grandes piezas circulares o para perfiles se usa también la faja de 10 o 15 CMS que enfarda la pieza mediante envolvimiento en espirales.