Smart packaging: el futuro del embalaje que ya es presente
Smart packaging: el futuro del embalaje que ya es presente
¿En qué condiciones de temperatura y humedad está siendo trasladada mi mercancía? ¿Han llegado estos alimentos en condiciones óptimas para el consumo? ¿Por dónde ha pasado este paquete antes de alcanzar su destino?
Contestar a todas estas preguntas -y a más- será posible gracias al smart packaging, una tecnología de embalaje y envasado diseñada para mantener al producto en unas condiciones óptimas durante toda la cadena de suministro, desde que este sale de las instalaciones del fabricante hasta que es consumido o usado por el cliente final.
El smart packaging es el futuro del embalaje… pero a la vez supone ya un presente muy sólido. Lo dicen los datos. Según el Smart Packaging Market Research Report – Forecast to 2023, desarrollado por Market Research Future, el smart packaging mueve un mercado de 46.000 millones de dólares a nivel mundial, con una tasa anual compuesta de crecimiento prevista del 5,16% para el periodo 2017-2023.
Smart packaging, ¿qué es?
El smart packaging es una tecnología de embalaje y envasado que combina lo mejor de dos tipos diferentes de packaging:
El packaging inteligente, capaz de monitorizar los cambios que sufren los productos guardados en el interior del paquete, tanto en su estado como en sus condiciones externas de conservación.
Y el packaging activo, que reacciona tomando medidas para asegurar la protección del producto ante esos cambios.
Por tanto, el smart packaging revoluciona el paradigma del embalaje tradicional, al ofrecer tanto al productor como al consumidor una serie de servicios adicionales que van mucho más allá de los que presta un simple receptáculo que posibilita el traslado y el almacenamiento de la mercancía.
Intelligent packaging + Active packaging = Smart packaging
En el smart packaging se conjugan las funcionalidades de dos tipos de envases y embalajes:
1. Intelligent packaging, o embalaje inteligente
El intelligent packaging se sirve de sensores y dispositivos que controlan en tiempo real la situación y el estado del producto y las condiciones de su entorno. Con ellos es posible medir:
Smart packaging en alimentación: la etiqueta cambia de color en función del estado de conservación de la comida
TTI, o indicadores temperatura-tiempo. Informan de a qué temperaturas ha estado expuestas un paquete y durante cuánto tiempo.
Grado de humedad.
Nivel de degradación. Ayuda a valorar si un alimento o cualquier otro producto de consumo humano sigue siendo apto para la comercialización y la ingesta.
Localización. Facilitada gracias a las etiquetas RFID, que no solo están preparadas para controlar la ubicación del producto en todo momento, sino también para almacenar información de por dónde ha pasado y establecer, así, su trazabilidad.
2. Active packaging, o embalaje activo
El active packaging está preparado para combatir las amenazas que se puedan presentar a lo largo de la cadena de suministro, corrigiendo las condiciones que pongan en peligro la conservación de la mercancía.
¿Cómo actúa, entonces, el embalaje activo? Normalmente, lo que hace es emitir alguna sustancia, o absorber algún agente dañino presente en el entorno (agua, oxígeno…), al detectar cambios de iluminación, presión, temperatura, humedad, etc. El objetivo es mantener al producto en el mejor estado posible durante más tiempo.
¿Qué sectores obtendrán más beneficios del smart packaging?
El smart packaging ofrece ventajas para todo el ecosistema logístico pero, en especial, para dos sectores: el de la alimentación y el de los productos farmacéuticos.
Smart packaging en alimentación
Las posibilidades del smart packaging en alimentación son apasionantes. Una de las técnicas más innovadoras es el MAP (Modified Atmosphere Packaging), que se basa en extraer el aire del interior de los paquetes y reemplazarlo por una mezcla de gases que tienen un efecto protector sobre los alimentos, manteniendo sus propiedades nutricionales y organolépticas intactas durante más tiempo.
Smart packaging en farmacia
El smart packaging en el sector farmacéutico ayuda tanto a garantizar la seguridad y la eficacia de los medicamentos como a favorecer el cumplimiento de las prescripciones por parte de los pacientes. Mediante tecnologías NFC o bluetooth, el packaging de las medicinas puede interactuar con móviles o tablets para mostrar al usuario cómo aplicar un determinado tratamiento o avisarle, con notificaciones vía app, de que llega la hora de la siguiente toma.
Aunque todavía deberá afrontar algunos desafíos a nivel económico, legal y medioambiental, el smart packaging se presenta ya como el futuro del embalaje.
Soluciones actuales de smart packaging
En Rajapack podemos ayudarte a implantarlo en tu empresa con productos que detectan si una mercancía ha sido manipulada incorrectamente a lo largo de la cadena de suministro. Con ellas, podrás cuidar mejor de la calidad y la seguridad de tus envíos. ¡Únete al smart packaging!
Indicador de temperatura descendente COLD ColdMark©
Indicador de temperatura descendente COLD
Es un indicador que está siempre activo (no necesita ser activado), cuando lleva 30 minutos expuesto a una temperatura inferior a la indicada, la ventana queda de color violeta.
Indicador de temperatura ascendente WARM WarmMark©
Indicador de temperatura ascendente WARM
Es un indicador de temperaturas altas, se activa estirando de la lengüeta y las ventanas se colorean dependiendo del tiempo expuesto a una temperatura superior a la óptima.
Indicador de Impacto ShockWatch©
Indicador de impacto
Este indicador es ideal para los productos delicados, si tu producto recibe un impacto, el indicador te marcará con tinte rojo el tubo central de la etiqueta.
Indicador de vuelco TiltWatch XTR©
Etiqueta indicadora de vuelco disponible en la tienda online de Rajapack
Si tu mercancía sufre un giro de más de 90º, el indicador cambiará de negro a rojo. Además, tiene un número de serie que te ayudará a asegurar la trazabilidad de la mercancía.
Entonces, ¿está tu mercancía etiquetada correctamente?